Diario Calchaquí desde Tucumán
El nuevo gobernador incorporó a su equipo a hombres y mujeres del radicalismo, Libres del Sur y con pasado reciente en el PRO.

El gobernador de Tucumán Osvaldo Jaldo asumió el pasado fin de semana y en las designaciones de sus ministros y secretarios de Estado incluyó a hombres y mujeres sin militancia en el peronismo para dar una señal de una gestión de perfil dialoguista. Lo había anticipado el mismo domingo durante su discurso de asunción, ocasión en la que estuvo presente el candidato a presidente por Unión por la Patria (UP), Sergio Tomás Massa, quien asegura que si triunfa en el balotaje del próximo 19 de noviembre pondrá en marcha un gobierno de unidad nacional. Tucumán, por lo tanto, hará las veces de tubo de ensayo de esta iniciativa.
Las primeras sorpresas fueron este mismo domingo cuando, por la tarde, Jaldo tomó juramento a sus ministros. Entre ellos, designó al legislador provincial reelecto de Libres del Sur, Federico Masso, como ministro de Desarrollo Social. El dirigente fue Secretario de Urgencias Sociales y Emergencias Climáticas de la provincia, durante la gestión del exgobernador José Alperovich, hasta que dio el portazo y se sumó a la oposición.
De la mano del Acuerdo Cívico Social, antecedente inmediato de Juntos por el Cambio (JxC) en Tucumán, estuvo al frente de la Secretaría de Atención de Urgencias Sociales del municipio de la capital, que condujo el intendente opositor Germán Alfaro; fue diputado nacional y legislador provincial hasta tomar distancia de ese espacio. En los últimos años se acercó a Jaldo, exvicegobernador, cuando estuvo al frente de la Legislatura. “Cuando recibí este ofrecimiento lo pensé bastante, he recorrido la provincia en los últimos dos años y medio y la verdad que he visto muchos tucumanos y tucumanas con grandes necesidades propia de la situación económica y social que se vive”, sostuvo, ante una consulta de este diario especializado en Política.
Otra extrapartidaria es la abogada Gilda Pedicone, quien fue designada como Fiscal de Estado de la provincia. Ya trabajó con Jaldo en estos últimos años porque fue él quien la puso al frente de la Dirección de Asesoría Letrada del Poder Legislativo. La funcionaria acredita un pasado con experiencia porque también fue funcionaria de la Caja Popular de Ahorros de Tucumán en 1978, un ente financiero y autárquico de la provincia, durante la dictadura militar. Cuando Antonio Bussi fue gobernador tucumano, entre 1995 y 1999, la nombró como titular de la Fiscalía de Estado, su primer paso en el cargo que hoy detenta. La letrada, también docente universitaria, fue abogada de Bussi en el juicio político por las cuentas que escondió en Suiza el genocida condenado por crímenes de lesa humanidad, ya fallecido. En 2015, Pedicone fue candidata a legisladora provincial por el PRO, partido al que se acercó a través del tucumano Pablo Walter, que estuvo al frente de AYSA, entre 2015 y 2019. Ambos se conocieron cuando Walter fue concejal y legislador provincial por el bussismo, hasta que se sumó a las filas del partido de Mauricio Macri y se convirtió en un hombre de su confianza.
Una de las designaciones más resonantes fue, sin duda, la del exlegislador radical José Ricardo Ascárate, que terminó su mandato hace unos días. Con militancia activa en el centenario partido y férreo opositor en la Legislatura que presidió Jaldo, también fue subsecretario de Infraestructura del Plan Belgrano en la gestión del expresidente Mauricio Macri. De familia radical, su hermana Lidia recorre sus últimas semanas como diputada nacional de JxC. El nuevo secretario, de profesión ingeniero y docente en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), elevó en las últimas horas una nota al presidente de la UCR tucumana, el diputado nacional Roberto Sánchez, solicitando que se le suspenda su afiliación durante su función como funcionario nacional.
Amplitud
Otro radical y exlegislador de buen diálogo con Jaldo que se sumó al Poder Ejecutivo tucumano fue Raúl Albarracín, nombrado en las últimas horas como Secretario de Gobierno y Relaciones Institucionales de la provincia. El boina blanca fue candidato a intendente de Concepción. Perdió, no estuvo tan lejos del triunfo, pero le sumó una suma considerable de votos a la fórmula Jaldo – Miguel Acevedo, porque su candidatura se concretó a través de un acople con el oficialismo tucumano. El abogado, de militancia “provida” y pañuelo celeste, se hizo conocido en 2018 cuando le entregó el “bebé de oro”, “por su trayectoria en defensa de las dos vidas”, a Amalia Granata, diputada provincial de Santa Fe. Otro de los nombramientos de Jaldo fue un guiño al movimiento de trabajadores organizados, al designar a César Torres, secretario general de la CGT local y titular del sindicato de Camioneros, al frente de la Secretaría de Trabajo.