El bloque de diputados Hacemos que preside Pichetto avisó que votará la ley Bases tal como vino del Senado, sin la privatización de Aerolíneas, el Correo y RTA. En cambio, sí apoyarán que el capítulo fiscal quede como lo votó Diputados en su momento, con la vuelta del impuesto a las Ganancias y la modificación de Bienes Personales. Hoy será el plenario de comisión y hay acuerdo para que se trate el jueves en el recinto. Un grupo de gobernadores irá este martes al Congreso.
La diplomacia habitual con la que se desenvuelve el presidente Javier Milei terminó de convencer a los diputados del bloque Hacemos Coalición Federal que no correspondía que hicieran un esfuerzo extra para que la ley Bases saliera como reclama el Gobierno. El nuevo «degenerados fiscales» y «desestabilizadores» que les obsequió el Presidente desde su gira europea les hizo notar que era ilegal volver a incorporar a la lista de empresas a privatizar a Aerolíneas Argentinas, Correo Argentina y Radio y Televisión Pública Argentina porque habían quedado fuera del dictamen en el Senado.
En cambio, le adelantaron a los representantes del Ejecutivo que sí retomarán el capítulo fiscal tal como fue votado en Diputados, con la vuelta del impuesto a las Ganancias para los trabajadores y las modificaciones a Bienes Personales, en lo que coincidieron también las bancadas del PRO y la UCR. Este martes será el plenario de comisiones y el jueves la última sesión de este debate eterno.
Como adelantó este diario Milei dio una entrevista temprano desde República Checa, antes de que abrieran los mercados, para desmentir los renovados rumores de devaluación. Pero no pudo con su genio y cuando le preguntaron por la suba del riesgo país y caída de los bonos, la emprendió contra los diputados que días atrás dieron media sanción al proyecto de movilidad jubilatoria que apenas si pretende que se les reconozca a los jubilados todo lo que perdieron este año por la inflación. Llegó a hablar de un «intento desestabilizador golpista de ciertos grupos de la oposición que hizo que el precio de los bonos caiga». Poco después, los negociadores del Ejecutivo tenían prevista una reunión con los representantes de las bancadas dialoguistas que impulsaron aquella sesión especial.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, sorprendió la semana pasada al asegurar que no había existido ningún acuerdo durante el tratamiento del proyecto en el Senado, por lo que los Diputados tenían las manos libres para insistir en su media sanción. Con todo, advirtió que le parecían bien los cambios que se habían incorporado al régimen de inversiones RIGI. Reclamó específicamente por la privatización de Aerolíneas, el Correo y RTA y, en el capítulo fiscal, por Ganancias y Bienes Personales.
Este lunes, el jefe del bloque Hacemos, Miguel Angel Pichetto, antes de ingresar al encuentro con el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, diferenció entre los dos pedidos. Dijo que esas tres empresas habían sido eliminadas de la lista de privatizables en virtud de un acuerdo que hizo explícito el miembro informante del oficialismo, Bartolomé Abdala, en el inicio de la sesión. Es decir, en el Senado ni siquiera se votaron. En el caso del capítulo fiscal, subrayó, se votó en general y luego en la votación en particular se eliminó Ganancias y la modificación de Bienes Personales, con lo que se podía interpretar como modificación, a tono con lo que marca el artículo 81 de la Constitución Nacional.
Con todo, la controversia no es tan lineal. El constitucionalista Andrés Gil Domínguez marcó la diferencia entre la validez formal y la validez sustancial de las leyes, por lo que es muy probable que lo que salga aprobado termine siendo judicializado.